viernes, 23 de enero de 2009

De planes, imprevistos, descuidos y otras yerbas o simplemente capacidad de cambio.



Desde pequeña, mi hija Marisol siempre deseó dos cosas: ser periodista y visitar Cuba. El primer deseo ya está pronto a cumplirse. Está en quinto año y por tanto falta la nada misma para que se titule. Con el segundo las aproximaciones han sido de diferente naturaleza: conocimiento cultural, largas lecturas sobre la revolución, el Che y Fidel; incluso su tesis la hizo sobre Cuba. Frente a tanto entusiasmo de la pequeña, ¿qué puede hacer una madre? Lo que haría cualquier madre si tuviera posibilidades: hacer realidad ese anhelado viaje.

En Marzo del año pasado decidimos juntar plata, aprovechar las promociones 2 x 1, el dólar a 480 pesos y al más puro estilo europeo planificamos nuestras vacaciones con diez meses de anticipación. El 15 de enero de 2009 viajaríamos finalmente a la Isla, visitaríamos, el museo de la revolución, el Cuartel Moncada, El Museo de la Clandestinidad, la tumba del Che… Ese día, a las cuatro de la mañana, cansados pero felices, con mis dos hijos y nuestros bártulos nos embarcaríamos. En algún momento recordé mis antiguos viajes a Cuba, las largas conversaciones que teníamos con Víctor (el papá de los niños) sobre el futuro de nuestro país, acerca cómo sería Chile en democracia. Habían pasado ya demasiados años.

En un segundo todo cambió. Ocurrió lo inimaginable no obstante lo meticulosa y precavida que soy (obsesiva, al decir de mi amiga Ely) , que hasta botiquín llevaba para el viaje. Hubo algo que nunca revisé, ni siquiera cuando fui al consulado a sacar las visas: la fecha de caducidad de los pasaportes. El día del viaje la única que tenía pasaporte al día era mi hija Marisol. A las seis de la mañana estábamos de vuelta en casa. El único comentario que se oyó fue: no era nuestro momento, por algo será. Así y todo, un par de horas después fuimos al Registro Civil y allí nos enteramos que recibiríamos nuestros nuevos pasaportes sólo después de seis días hábiles.

En el intertanto había que ver qué podíamos hacer con los pasajes y así nos enredamos en una larga historia, en la que las posibilidades de embarcarnos a Cuba se esfumaban con el pasar de las horas. Cundía el desánimo y la frustración Hasta que finalmente a las nueve de la noche en tono firme y energético dije: “Ya, chicos, a bajar las maletas, saquemos lo que no vamos a necesitar y mañana a primera hora partimos… Estamos de vacaciones…” Los dos incrédulos me miraron y empezaron a apremiarme. ¿Adónde vamos a ir?, era la pregunta. Le respondí que al Norte. Pero ¿adónde? ¿en qué? “Ya, vamos moviéndonos, menos lamento y a cargar el auto. Mañana a primera hora nos iremos al norte adonde nos lleve el camino”, dije.

Abrimos la botella de vino que pensábamos tomar en La Habana, hicimos un jocoso repaso de nuestra tragicómica jornada y cuando volvió a plantearse la pregunta sobre el destino del viajar. sin titubear dije: Bahía Inglesa. No tenía la menor idea de dónde quedaba, pero alguna vez a alguien le oí que era un lugar muy hermoso
Resumiendo, de la exuberante naturaleza caribeña que imaginaban los niños pasamos a los misterios del desierto de Atacama. Luego de más de 800 kilómetros de carretera terminamos en un lugar paradisíaco, con los mismos códigos, las mismas fisonomías, las mismas conversaciones que se oyen en los cafés de Santiago. Efectivamente, no era lo que habíamos planificado, pero concluimos que lo más importante era estar juntos, cumpliendo con el objetivo, que era descansar, regalonear, desconectarse y cargar pilas para este nuevo año, que en lo familiar nos plantea muchos desafíos académicos.

Todo lo anterior, ¿Tendrá algo que ver con el acontecer político? Imagino que la concertación tendrá claro que el objetivo para el próximo período, no es ganar las elecciones por mantenerse en el poder. Imagino que la candidatura única en la concertación responde a la convicción de los partidos que la componen que se requieren transformaciones profundas en el modelo económico neoliberal, en el sistema político con una nueva constitución, un Estado de bienestar. Imagino que no será más de lo mismo…y con los mismos.

Parece que he tomado mucho sol y estoy imaginando demasiado…

martes, 13 de enero de 2009

De sueños, muñecas, criterios para los tiempos que vienen y otras yerbas o simplemente en pausa reflexiva.


“Anoche tuve un sueño, soñé con un país…”, grandes líderes en algún momento de sus vidas utilizaron esa oración para dar cuenta de sus anhelos, proyectos y propuestas políticas. Como no es mi caso, recurriré a un criollismo, ya que las muñecas no tienen color político y cualquiera puede tener una, de modo que no encuentro razón para que la mía no hable.

Pues bien, mi muñeca me habló y me dijo cosas, tantas cosas que ante los futuros acontecimientos, llámese Convención Socialista Presidencial, haré un esfuerzo de transmitirles ordenada y sintéticamente sus inquietudes y consejos. La muñeca me dijo:
¿Leíste bien el instructivo que envió el Secretario General del Partido sobre quienes participan y como se inscriben las pre-candidaturas? Es fundamental que al presentar mi candidatura cumpla con todas las formalidades, no vaya a ser que más de alguien crea que es una tomadura de pelo.

¿Qué pasa con aquellos que fueron delegados electos al Congreso y que hoy no están en los registros? ¿Pueden ellos avalar candidaturas? Algunos delegados a Panimávida que han apoyado mi postulación hoy no están en los padrones. Vuelvo a leer el instructivo y veo que se hace hincapié en su condición de delegados al momento del evento.

¿Qué ocurre con los Alcaldes y Concejales que participaron en el Congreso y luego no fueron reelectos o no fueron candidatos? Imagino que funciona el mismo criterio que para lo anterior.

Me aconsejó: “Más vale que preguntes”. Pero comienzan a asaltarme las dudas sobre las bondades del consejo de la muñeca. Si pregunto y envío una carta formal, lo más probable que ni mis nietos reciban la respuesta. Para que no piensen que hablo por hablar o escribo por escribir: sigo esperando que el Tribunal Supremo me responda una presentación que hice en el año 2006 (sobre los extemporáneos e inoportunos dichos al Mercurio de un dirigente nacional del Partido). Si esto parece de data muy antigua, aporto un ejemplo más reciente: en noviembre pasado envié una carta al Presidente y Secretario General del Partido y... muy bien, gracias.

Ahí la muñeca me dijo: hay que solicitar a la Comisión Defensora Ciudadana que haga extensiva a los partidos político la norma que rige en la administración pública y que establece plazos para responder la correspondencia.

Bueno, pero volviendo a lo central, lo último que me dijo fue: nadie te garantiza la elección. Me sugirió una gira por Centroamérica el Cáribe para buscar apoyos internacionales y sólo al regreso resolver sobre la candidatura.

Por lo cual, queridos amig@s, a todos aquell@s que han apoyado mi candidatura y que se han ofrecido de jefes de campaña, mis agradecimientos profundos.

Para este viaje me llevaré de texto de consulta el Oráculo del Concertacionista y estudiaré profundamente los criterios que se aplican a la contingencia:

Criterio PS: Sube uno, baja uno.
Criterio PPD: sube uno bajan tres.
Criterio DC: todo para mi, si no, no hay acuerdo.
Criterio Perez Yoma: apretar los dientes.
Criterio Lagos: que las instituciones funcionen.

No los defraudaré, haré una pausa reflexiva en esta difícil tarea de ser candidata y a mi regreso informaré al país mi decisión.


miércoles, 7 de enero de 2009

De convenciones, candidaturas y otras yerbas o simplemente Suárez Candidata


Más vale tarde que nunca. Costó, pero por último se decidió: José Miguel Insulza finalmente no será candidato a presidente por la sencilla razón que cada vez son más los que no quieren que se realicen primarias. El ejercicio democrático está bien, pero nunca en exceso, máxime si los candidatos o precandidatos son competitivos. Donde, además, lo más seguro sería que el ganador no fuera el representante del partido que considera que es su turno por el principio de la alternancia (Se escucha música de fondo: “Ya se la tomó, ya se la tomó; ahora le toca al vecino…”).

La sola realización de las primarias generaba demasiados problemas. Por un lado, es de público conocimiento el patético estado financiero de uno de los partidos de la Concertación, y para acudir a las primarias hay que tener plata y una que otra cosita más, como cohesión interna, descolgados que no hagan ruido. Se precisan también garantías de que ese candidato gane. Es decir, es una ecuación bastante compleja de despejar, aunque estos años la ingeniería política se ha desarrollado hasta tal punto, que sus sacerdotes pueden explicar lo inexplicable, resolver el más enrevesado de los entuertos y todo lo que por el bien de la Concertación y el país sea necesario.

De modo que es evidente que no habrá primarias, sino acuerdo. Frei gana por secretaría. Se dio el escenario que quería Ricardo Lagos para él, pero dilató tanto su decisión que se convirtió efectivamente en el perro del hortelano. Ni él, lo que es la parte buena de la historia, ni Insulza.

Sin embargo, el Partido Socialista, fiel a sus acuerdos de Congreso (todavía espero las conclusiones del 28, pero ése es un detalle), realizará el próximo 17 de enero una Convención Presidencial para elegir nuestro candidato. Hay plazo hasta el mediodía del día 15 para inscribir las candidaturas.

Como bien saben, el requisito para inscribirse es contar con el respaldo de al menos 50 firmas, así es que a firmar, a firmar, que el mundo se va acabar y la Suárez se va a lanzar. Claro que todo esto lo tendré que dejar en manos de un apoderado ya que al momento de la Convención estaré de vacaciones. Por tanto, en este acto público junto con pedir que firmen por Suárez Presidenta, dejo un poder a un hombre que sabrá defenderme hasta el final, que no me transara por ningún distrito, circunscripción, subsecretaría o ministerio. Me refiero al compañero Camilo Escalona.

El poder se lo dejo a él como persona, no como presidente del Partido, ya que -nunca se sabe- después de rendir su cuenta polítca podría aprovechar la presencia de tanto congresal para poner su cargo a la disposición de la asamblea. Y, bueno, no llevaremos canditato presidencial, pero los socialistas tendríamos un nuevo presidente.

sábado, 3 de enero de 2009

De balances, rituales, años nuevos y otras yerbas o simplemente Gracias


Pasaban las horas del último día del año, el 31 de diciembre de 1969. Vivíamos en Abel González 055 en el paradero 21 y medio de la gran avenida, en La Cisterna y luego pasaban los minutos, el tiempo se hacía eterno, mirábamos el reloj, pero por sobre todo la puerta, faltaban 15 minutos para recibir el nuevo año y mi viejo no llegaba. Con mi mamá y hermano en silencio sólo observábamos y esperábamos …mi viejo estaba en la reunión de los partidos de la Unidad Popular donde se esperaba que saliera humo blanco con la candidatura a Presidente del Salvador Allende. De repente 10 minutos antes llegó el papá y todos respiramos profundamente y a los pocos minutos nos abrazamos, lloramos había llegado 1970. Un año que nos cambiaría la vida a todos.

Desde ese día hasta muchos años después, cuando llegaban las 12 de la noche me ardían los ojos y solita, sin que nadie la llamara la lluvia, llegaba a mi rostro… seguramente las reminiscencias y nostalgias sureñas.

Con el tiempo y las vicisitudes de la vida he aprendido a agradecer cada año que se va y feliz de recibir uno nuevo. Somos de una generación privilegiada con grandes triunfos y grandes fracasos y tristezas, somos sobrevivientes, testigos de los momentos más intensos que ha vivido nuestro querido país. Criados en el Partidos y creciendo con la Revolución Cubana. Hemos tenido la capacidad de reinventarnos, sobreponernos, reírnos de todo y de todos, sobre todo de nosotros mismos.

El último día de este 2008 en la oficina nos juntamos, disfrutamos de un rico cocktail que habíamos encargado al Brown, donde mi amiga Laura que siempre está pendiente de cada detalle. Hicimos un pequeño balance, mal que mal para una ONG es difícil mantenerse en estos tiempos, pero terminamos contentos con nuestro trabajo y esperando que este sea mejor, que podamos seguir aportando en Participación Ciudadana, Eficiencia Energética, Manejo de residuos sólidos y bueno a todas esas cosas que nos dedicamos y que algunos creen que son tonteras… finalmente los tontos son ellos no me cabe la menor duda.

En la noche nuestro programa era seguro y garantizado. Antes de salir de casa, por supuesto que desearle feliz año a Bernardo en Moscú, el cual a esa hora hacía ratito que estaba viviendo el 2009. Teníamos buen ambiente, excelente música, para que hablar de la comida… La Habana Vieja donde Keryma y Guillermo se preocupan de cada detalle. Con mis hijos y mi tía Gaby nos dispusimos a pasar una excelente noche. Las mujeres radiantes lucíamos nuestras coronas. Lo mejor de todo fue cuando una señora se acerca a la Tía Gaby y le dice: su majestad permítame saludarla, ella lucía como una verdadera reina.

Las doce, los abrazos, los brindis por: nuevo año y los 50 de la revolución. Alzamos nuestras copas y partimos a la calle a Tarapacá con San Francisco a disfrutar de los fuegos artificiales. Y por supuesto la primera llamada del año… como dice la canción “amores que se vuelven resistentes a los daños … Amores que se esperan al invierno y florecen y en las noches del otoño reverdecen”


Y el día primero de enero ocurrió algo impensado que en definitiva hizo que hoy a primera hora me sentará a escribir estas líneas. En el living de mi casa tres Suárez, así es: Gabriela Suárez Bastidas, Alexandra Suárez Aguilar y bueno la Suárez Indart. Las tres diferentes, con formas de ver la vida y vivirla distinta. Pero, ahí entendí el viejo dicho de la sangre tira. Toda la historia de nuestra familia se concentraba en estas tres suaves y delicadas mujeres, las cuales junto con el apellido las une una fortaleza de hierro ante la adversidad.

Finalmente, no sería yo sino hablara de mi otra gran familia: El Partido Socialista. Hice la misma analogía, independientemente de las discrepancias, rencillas, debilidades y fortalezas; tenemos una historia común, la sangre de muchos corre por nuestras venas y que bueno que pensamos distinto, lo que nos ha permitido madurar y, por cierto, tenemos muchos desafíos para este 2009: El último año de nuestra Presidenta, de materialización y concreción del programa; las primarias con nuestro querido José Miguel Insulza de candidato y, por qué no, a Andrade en la Presidencia del Partido….

Gracias 2008…